Hornos almohades de la Avenida de Roma

La Comisión de Patrimonio aprobaba hace unos días el proyecto que contempla restituir los restos romanos hallados en el solar de La Florida una vez acabadas las obras de construcción del nuevo edificio. La propuesta plantea volver a colocar los elementos encontrados en el lugar donde aparecieron, recreando incluso parte del alzado del edificio romano encontrado y que estaría asociado al puerto de Hispalis. La noticia me recordó a lo ocurrido durante las obras de construcción del aparcamiento de la Avenida de Roma, donde además de un edificio romano (mosaico incluido), apareció también parte de una calzada y dos hornos de época almohade. 

Mientras que el mosaico fue trasladado al Museo Arqueológico (o eso se dijo) sin que se haya vuelto a saber nada de él, la calzada fue instalada años más tarde en Puerta de Jerez sin seguir ningún criterio en particular mientras que los dos hornos almohades padecieron su particular calvario del que me hacía eco en el blog hace ya nueve años. No había vuelto a entrar en este aparcamiento subterráneo donde se conservan ambos elementos arqueológicos y me he llevado una gran sorpresa al comprobar que su situación ha mejorado sustancialmente. La construcción de un cierre acristalado alrededor de cada uno de los hornos garantiza una mejor conservación, aunque aún quedan varios asuntos pendientes.

La conservación de este tipo de elementos arqueológicos en infraestructuras contemporáneas debería ir acompañada, siempre, de un proyecto de puesta en valor. De la misma manera que las instituciones exigen su conservación, deberían instar y colaborar en su puesta en valor. Carece de sentido que se obligue a un particular a conservar un elemento de este tipo si luego no se garantiza una correcta conservación que permita a cualquier ciudadano saber qué es lo que está viendo y por qué se ha conservado. La exposición de estos dos hornos debería contar con una iluminación acorde, una cartelería explicativa e incluso una señalética que indique su ubicación dentro del aparcamiento. ¿Por qué es necesario llevar a cabo estas medidas? Es sencillo, para que cualquier usuario vea en estos restos una parte de nuestro pasado con un valor; de lo contrario serán interpretados por gran parte de la ciudadanía como dos elementos extraños que ocupan el espacio de varias plazas de aparcamiento.