Objetivo Sevilla 2023

La nueva Ronda del Tamarguillo. Fuente

Las últimas elecciones municipales dejaron un claro vencedor. Juan Espadas consigue dos concejales más que en 2015 y se sitúa a la cabeza del Ayuntamiento con 13 ediles, seguido del Partido Popular (8), Ciudadanos (4), Adelante Sevilla (4) y Vox (2). Tras haber conseguido 20.000 votos más que hace cuatro años, Espadas tiene ante sí el reto de volver a gobernar Sevilla, pero necesitará el apoyo de algún otro partido para ser investido alcalde. Todo está por ver pero de esos apoyos (a la izquierda, Adelante Sevilla y a la derecha Ciudadanos) dependerá qué medidas se tomen a partir de ahora en el Pleno municipal.

Atendiendo a las diferentes propuestas que ha realizado el equipo del PSOE local durante la campaña, me gustaría resaltar aquellas que están más relacionadas con los temas que se tratan en este blog y que, por lo tanto, podrían cobrar protagonismo en los próximos cuatro años.

El nuevo 'bosque' del Polígono San Pablo. Fuente

La Sevilla que Juan Espadas plantea para 2023 tiene en el urbanismo una de sus principales bazas. Proyectos como la reforma de la avenida de la Cruz Roja, la calle Torneo o el Paseo de la O deberían sumarse a las intervenciones realizadas en estos cuatro años, entre las que destaca la polémica reurbanización de la avenida del Greco o la construcción de una nueva zona verde sobre el tanque de tormentas de la Avenida Kansas City. Las remodelaciones urbanísticas anunciadas prometen dejar una ciudad más verde y arbolada que la actual con intervenciones sumamente ambiciosas como las planteadas en la Ronda del Tamarguillo, que pretende convertir el actual bulevar de albero en una zona ajardinada con equipamientos deportivos y culturales, el "bosque" del Polígono San Pablo o la reforma del entorno del Casino de la Exposición para hacer de este espacio una auténtica ágora cultural. A estas actuaciones habría que sumar, en materia verde, la promesa de plantar 5.000 árboles al año, alcanzando la cifra de 20.000 nuevos ejemplares en 2023, además de la creación de un inventario de árboles históricos.

El patrimonio y la cultura serían, según lo planteado en campaña, otro de los grandes ejes del segundo mandato de Espadas. La conversión de parte de la Fábrica de Artillería en el Centro Magallanes debería ser una realidad en los próximos años, del mismo modo que el Pabellón Real acogería un museo dedicado a la figura de Aníbal González, el Antiquarium se convertiría en Museo de Historia Antigua de Sevilla donde se expondría el Tesoro del Carambolo y Altadis pasaría a ser un gran centro dedicado a la creación artística contemporánea.

Pabellón principal de la cárcel de la Ranilla

A estos nuevos equipamientos se sumaría la Casa Cernuda, cuya compra ya ha obtenido el visto bueno del Ayuntamiento y que tras su rehabilitación se convertiría en la sede de la Casa de las Letras y los Poetas. También cuenta con presupuesto por parte del Gobierno Central la rehabilitación de las murallas de la Macarena y la Torre de don Fadrique del convento de Santa Clara, edificios municipales a los que habría que sumar la Hacienda de Miraflores, en la que ya se está interviniendo y que se convertirá en un centro dedicado al Medio Ambiente, la Fábrica de Vidrio, la iglesia de San Hermenegildo o la cárcel de la Ranilla, que también debería ser recuperada en estos cuatro próximos años. La rehabilitación de las naves de Renfe de San Jerónimo, sede de Sevilla Futura, también debería ser una realidad antes de las próximas elecciones al haber comenzado ya las obras.

Una larga lista en la que, ni muchos menos, están todos los temas planteados durante la campaña electoral. Se suele decir que "el papel lo aguanta todo" y en cuestión de promesas electorales estamos bien acostumbrados a olvidar en cuatro años lo que los candidatos venden con tanta facilidad. Desde luego, tras cuatro años gobernando, no se puede decir que Espadas no sepa qué problemas se puede encontrar para sacar adelante estos proyectos por lo que debemos ser exigentes con todo lo que ha prometido. Al margen de las promesas, una de las cuestiones por las que se ha pasado de puntillas durante la campaña es quizás una de las más urgentes, la situación de pobreza en la que viven varios barrios de la capital, donde se encuentran las zonas más pobres a nivel nacional. De nada sirven los Goya, los MTV y todas las cumbres turísticas del mundo si luego parte de la población no tiene la más mínima posibilidad de tener una buena calidad de vida. Ojalá este sea el gran objetivo, la gran obsesión de Espadas estos próximos cuatro años, dejar una ciudad más justa, más igualitaria y con más oportunidades para sus habitantes de la que tenemos en 2019. Todo lo demás puede ser la guinda del pastel, pero lo fundamental es mejorar la calidad de vida de los sevillanos. Suerte, la tarea es compleja, muchísimo más compleja que organizar un evento multitudinario pero también mucho más necesaria.