La polémica está servida en el mundo artístico sevillano. Uno de los premios más conocidos a nivel nacional, el que convoca la Universidad de Sevilla, quedaba desierto el pasado 7 de febrero. La XX edición del Premio Nacional de Artes Plásticas se convocaba hace unos meses logrando una participación superior a los trescientos artistas de todo el país. El pasado día 7 de febrero, el Jurado del premio, compuesto por críticos y profesores de la Universidad de Sevilla declaraba desierto el certamen al considerar que ninguna de las obras seleccionadas tenía la calidad exigida para ganar los 1.500 euros del primer premio.
Acto seguido las protestas se desencadenaban en las redes sociales y se creaba la página de Facebook 'Premio Desierto' en la que se critica la decisión del Jurado al considerar un desprecio al mundo artístico nacional el declarar desierto un certamen en el que han participado más de trescientos artistas. ¿Acaso está queriendo decir la Universidad de Sevilla que los jóvenes artistas españoles no están a la altura de las circunstancias? Lo que nacía como una crítica, se ha convertido en una convocatoria artística más amplia en la que se invita a todo aquél que esté interesado apoyar a los artistas que se han presentado al premio.
Los organizadores de esta propuesta pretenden, además de denunciar lo ocurrido, realizar una exposición virtual con las obras participantes para que sea el público el que decida si realmente había o no calidad en las piezas.
No es la primera vez que se declara 'desierto' un certamen artístico y siempre que esto ocurre surgen las mismas preguntas, ¿realmente no había calidad? ¿Es la declaración de 'desierto' una forma de ahorrarte el tener que pagar el premio? Sólo el tiempo y exposición pública de las obras seleccionadas nos permitirá comprobar, con nuestros propios ojos, el nivel y la calidad de las piezas.
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