sábado, 12 de enero de 2013

Crónicas urbanas: Centro del Mudéjar

El primer trimestre del año se presenta calentito en cuanto a inauguraciones culturales. La primera de ellas ha sido el Centro del Mudéjar, que abrió sus puertas ayer en el maravilloso palacio de los marqueses de La Algaba, justo detrás de la iglesia de Omnium Sanctorum.

Tras una inauguración algo caótica (los que estuvieron allí comentan que fue prácticamente imposible ver nada por la cantidad de gente invitada) la calma ha regresado a los patios, jardines y salones del antiguo palacio, sede de la delegación de Bienestar Social del Ayuntamiento y que ahora se ha musealizado para servir como punto de referencia del arte mudéjar.

Para ello el Ayuntamiento ha elaborado un interesante recorrido expositivo en el que podemos disfrutar de 111 piezas algunas de ellas cedidas por los tres grandes museos sevillanos que se suman a las procedentes de la propia colección municipal.

La visita se inicia por el torreón de la fachada principal, justo donde se encuentra la bella entrada construida a finales del siglo XV siguiendo los modelos del palacio de Pedro I en el Alcázar. Una vez dentro, podemos visitar el patio principal, en el que sólo se conserva una de las columnas de mármol originales de la remodelación emprendida en el siglo XVI, parte de los jardines y la monumental escalera que lleva a la planta alta.




Aún en planta baja se conserva el llamado 'Salón de Doña Leonor' en el que la fabulosa techumbre de madera policromada da una idea de la riqueza que tuvo este edificio, abandonado ya en el siglo XVII y muy dañado en las remodelaciones y parcelaciones llevadas a cabo en los siglos XIX y XX.


La exposición del Centro Mudéjar se dispone en dos salones de la planta superior, uno más pequeño, gemelo al de Doña Leonor, que alberga la introducción al espacio. Aquí podemos ver una estrella en el centro de la sala con diferentes piezas que se van iluminando dejando que la techumbre (una copia de la original) se refleje en los cristales.




En esta sala se hace una pequeña descripción del término 'mudéjar' (aquellas personas que tras la conquista cristiana de los reinos islámicos se quedaron aquí y trabajaron un determinado tipo de ornamentación que aúna lo cristiano y lo musulmán) y se inicia al visitante sobre los testimonios arquitectónicos y artísticos que aún se conservan en la ciudad de Sevilla. 



Ya en la segunda sala nos encontramos un gran número de piezas procedentes de diferentes edificios como el convento de Santa Clara, el de Madre de Dios, el propio palacio de los Marqueses de La Algaba o la casa de los Señores de Gelves, ya desaparecida. Entre las piezas más interesantes nos encontramos un dibujo de Joaquín Guichot que representa la propia fachada del palacio, las yeserías provenientes de la iglesia de Santa Marina que sirvieron a José Gestoso para reconstruir la cúpula de una de sus capillas o elementos originales de la iglesia de San Marcos retirados a finales del siglo XIX y que, gracias a ese "expolio" sobrevivieron al terrible e injustificado incendio de 1936.





Una agradable visita a un edificio que, sin duda, merece la pena conocer y visitar. Sevilla gana un centro muy interesante que, esperemos, se vaya ampliando con el paso del tiempo. Si bien la exposición resulta muy ilustrativa y didáctica, se hace algo agobiante por la sobrecarga de piezas, que aparecen muy juntas y sin apenas espacio para respirar; lo que obliga al visitante prácticamente a ir en fila india uno tras otro para poder ir leyendo toda la información. Sería interesante que, en un futuro, la exposición se amplíe a otros espacios del edificio, distribuyendo al público y mostrando más piezas. La apertura de este espacio bien podría servir de excusa para poner en valor el rico legado mudéjar conservado en la ciudad, con rutas y una señalización específica que invite al visitante a adentrarse por la ciudad para conocer su riqueza patrimonial. Para ello, el hecho de disponer la información en castellano e inglés es todo un acierto. El complemento ideal de la visita es el interesante libro sobre el palacio que acaba de publicar el Ayuntamiento en su colección Patrimonium Hispalense, que bien se podría vender en el propio edificio para garantizar su éxito y distribución.


Dirección: Plaza Calderón de la Barca (detrás del Mercado de la calle Feria)
Horario: De lunes a viernes de 10 a 14 y de 17 a 21; los sábados sólo por la mañana. Entrada gratuita.

5 comentarios:

Jose Maldonati dijo...

Muy interesante. Gracias por la aportación. Como idea para tu blog, además de la ayuda que nos serviría a muchos, sería interesante que incluyeras el precio de admisión y los horarios.

Gracias. Un saludo

Sergio Harillo dijo...

Lamentablemente no he podido poner el horario de apertura porque no aparece por ninguna parte. En la web del ICAS no dice nada del horario y la verdad es que esta mañana se me olvidó preguntarlo allí.

Me imagino que tendrá el mismo horario que otros espacios municipales, de 10 a 14 y de 17 a 21, los sábados sólo por la mañana. El precio es, de momento, gratuito.

Un saludo

Jesús dijo...

Horario de 10 a 14 y de 17 a 20 horas, de lunes a viernes y los sábados de 10 a 14 h., siendo la entrada gratuita.

Sergio Harillo dijo...

Gracias por la información, Jesús.

Un saludo!

Mari Carmen dijo...

Estupendo reportaje. Muchas gracias.

A ver: casi podría asegurar que para Semana Santa o Feria, ya nos costará algún dinerillo...
Nací es esta calle, pero enla parte más ancha, frente a la antigua Fábrica de Luz..¡Qué tiempos!

Saludos.