jueves, 7 de mayo de 2020

Declarados Bien de Interés Cultural los cines Llorens, Trajano y Cervantes



La maquinaria burocrática no se detiene por la pandemia y el pasado 29 de abril se formalizaba la declaración como Bien de Interés Cultural de los cines Cervantes, Llorens y Trajano, que quedan inscritos en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz con la tipología de Monumento.

El camino ha sido largo y tortuoso para estos tres edificios de los que a día de hoy sólo el Cervantes sigue en uso. Los otros dos se encuentran en diferentes situaciones. Mientras que el Llorens, en plena calle Sierpes, lleva cerrado desde hace unos años a la espera de nuevo inquilino, el Trajano se encuentra inmerso en un proceso de transformación para convertir el edificio en uso terciario (hotel o apartamentos turísticos). El propietario de este último se ha comprometido a recuperar el espacio escénico que ocupa el patio del edificio diseñado por Aníbal González y que, a tenor de las imágenes aparecidas en prensa, presenta un estado de conservación bastante crítico.



Fachada del Cine Llorens


La protección de estos tres edificios con la máxima categoría que permite la legislación española supone un paso más en su historia, pero en absoluto garantiza su recuperación y puesta en valor. Sólo hay que ver la situación del yacimiento arqueológico del Carambolo, en Camas, para advertir que la protección como BIC no siempre viene acompañada de una mejora en la conservación del mismo, a pesar de que la Ley obligue a ello a propietarios y administraciones.


Interior del Cine Llorens


Los cines Llorens, Trajano y Cervantes forman parte de lo que la declaración BIC define como un eje lúdico y cultural que se extendía prácticamente desde Puerta de Jerez (Teatro Eslava) hasta la Alameda de Hércules, donde proliferaron desde la segunda mitad del siglo XIX hasta bien entrado el siglo XX recintos destinados a las artes escénicas de todo tipo. La lista es abrumadora (Eslava, Coliseo, Llorens, Pathé, Central, San Fernando, Álvarez Quintero, Imperial, Novedades, Lido - Trajano, Cervantes, Duque...), pero muchos de ellos sucumbieron a la piqueta o al cambio de uso para terminar siendo convertidos en locales comerciales. Aún así, además del Cervantes, espacios como el Cine Pathé, el Teatro Álvarez Quintero o el del Duque siguen manteniendo una programación basada en las artes escénicas. Fue precisamente la protección de esta tipología arquitectónica la que motivó que en el Plan General de Ordenación Urbana de 2006 se protegieran muchos de estos edificios, protección que fue tumbada por los tribunales y eliminada durante el mandato de Zoido, hecho que motivó, por ejemplo, la destrucción de la Sala Apolo. En 2016, un año después del derribo, el Pleno municipal solicitaba a la Junta de Andalucía la declaración como BIC del Cervantes, Llorens y Trajano, iniciándose así un expediente que ha culminado felizmente cuatro años después.


Interior del Cine Llorens


Sobre la historia de estos tres edificios se ha hablado largo y tendido en este Blog en multitud de ocasiones. Una simple búsqueda permite acceder a más de una decena de artículos donde se detalla el devenir de los teatros históricos sevillanos durante los últimos años. El Gran Teatro Cervantes fue construido en 1873 por Juan Talavera de la Vega siendo el espacio escénico en uso más antiguo de la ciudad, en el Llorens, reformado en 1913 por José Espiau y Muñoz, se proyectó la primera película sonora en la ciudad ('Sombras blancas en los Mares del Sur', el 9 de enero de 1930), mientras que el Cine Trajano (construido por Aníbal González entre 1920 y 1923) es un representante de la evolución de este tipo de espacios en la ciudad, desde que fuese construido como salón de variedades hasta su última etapa como cine X.


Fachada del Cine Trajano hacia la calle Trajano


Algunos, al leer esta entrada, quizás se sorprendan pues en los últimos años ha aparecido en varias ocasiones en prensa que los tres teatros habían sido declarados Bien de Interés Cultural. En realidad, en 2018 la Junta de Andalucía incoaba el procedimiento para incluirlos en el Catálogo de Patrimonio Andaluz, pero aunque desde ese momento los edificios estaban protegidos, no ha sido hasta ahora cuando se ha finalizado el trámite, ya que en este tiempo no sólo se han redactado los informes de cada edificio, sino que se ha atendido tanto a las demandas de otras administraciones (en este caso el Ayuntamiento de Sevilla) como de los propietarios de los inmuebles, con los respectivos plazos necesarios para presentar las reclamaciones que estimasen oportunas. Una vez superados todos los trámites, los tres edificios han sido inscritos en el Catálogo por lo que se hace efectiva la declaración.


Fachada del Cine Trajano hacia la calle Amor de Dios


La historia está lejos de concluir ya que la protección como BIC supone un nuevo reto tanto para los propietarios como para las administraciones. Desde ahora deberán trabajar conjuntamente para rescatar del olvido estos edificios. Para ello será necesario la comprensión de las administraciones pero también el compromiso de los propietarios para respetar las características histórico artísticas de los inmuebles, que deben adaptarse a los nuevos tiempos pero garantizando en todo momento la conservación de los valores que los han hecho merecedores de la declaración como Bien de Interés Cultural.



>> Os recomiendo la lectura del BOJA en el que se declara BIC estos tres edificios, se aporta información histórica de cada uno de ellos muy interesante (enlace)

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