El Ayuntamiento ha decidido retirar toda aportación económica a la Fundación Naturalia XXI, de la que es miembro fundador y patrono. La razón esgrimida por la Gerencia de Urbanismo es la "duplicidad de funciones" ya que considera que las actividades que lleva a cabo Naturalia XXI han sido asumidas por el Servicio de Parques y Jardines municipal.
La Fundación Naturalia XXI nació hace varios años con el objetivo de recuperar y poner en valor el patrimonio natural heredado de la Exposición Universal de 1992. Hizo falta el empeño ciudadano (la Fundación nace primero como asociación) para rescatar los jardines Americano y Guadalquivir ante la desidia y completo desinterés de las administraciones. Si no fuera por Naturalia XXI y el trabajo de sus gestores, hoy no estarían abiertos estos dos emblemáticos espacios. Por eso llama la atención el desdén con que el delegado de Urbanismo ha tratado a la fundación. El Ayuntamiento alega que en los últimos dos años se han destinado 170.000 euros para financiar las actividades de esta institución, una cantidad prescindible, a ojos del delegado de Urbanismo, ya que estas mismas actividades las puede realizar Parques y Jardines. Desconoce el delegado la nefasta gestión y mal funcionamiento del área de Parques y Jardines, sin lugar a dudas el peor servicio municipal del Ayuntamiento. Dejar en manos de este área los dos emblemáticos espacios verdes del 92 es condenarlos a desaparecer.
Ignora también el Ayuntamiento que el objetivo de Naturalia XXI es mucho más amplio y enriquecedor para la ciudad ya que incluye no sólo la puesta en valor del patrimonio verde de la Expo, sino darle uso a los pabellones de la Naturaleza y del Futuro, un proyecto que no ha llegado a buen puerto precisamente por los constantes problemas presentados por las administraciones implicadas en el proyecto, que se niegan a que Sevilla recupere para el uso ciudadano espacios que fueron creados para ello.
Con este recorte económico a la fundación Naturalia XXI prácticamente se la condena a su desaparición, eliminando de raíz uno de los escasos movimientos ciudadanos y cívicos que habían conseguido parte de sus objetivos en los últimos años. Con esta actitud errática el Ayuntamiento demuestra, una vez más, el nulo interés que tiene por hacer de la ciudad de Sevilla un lugar más habitable y con mayor calidad de vida. Si de ahorrar se trata, haría bien el alcalde por empezar eliminando los múltiples cargos de confianza que engrosan el apartado de "personal" de los presupuestos municipales.
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