miércoles, 1 de julio de 2015

El Cristo de las Mieles vuelve a brillar en el Cementerio


El pasado mes de abril culminaba la restauración del Cristo de las Mieles llevada a cabo por José León Calzado y un equipo de profesionales que han devuelto a la escultura la integridad con que fue labrada en 1880. El Crucificado de Antonio Susillo centra la glorieta principal del cementerio de San Fernando y remata un monte calvario pétreo que ha recuperado su aspecto rocoso tras la eliminación de la vegetación que lo cubría.




El Cristo de las Mieles es una de las piezas más importantes e interesantes de la obra de Susillo, escultor fundamental de la segunda mitad del siglo XIX en Sevilla. La escultura, fundida en bronce, es conocida como 'de las Mieles' por la leyenda que cuenta que de su boca manó miel cuando Susillo fue por fin enterrado bajo sus pies tras una primera negativa por parte de las autoridades religiosas por considerar pecado su suicidio.


La intervención, presupuestada en 30.000 euros, ha permitido erradicar los problemas de oxidación que afectaban a su superficie, que ha sido consolidada y limpiada. Con esta actuación se recupera uno de los monumentos de mayor calidad y belleza de cuantos decoran las calles de la ciudad. 


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3 comentarios:

Mari Carmen dijo...

Sergio,me encanta esta entrada. en mi blog, con fecha de 23 de agosto del 2010, hice otra sobre el tema, mucho más modestita que la tuya, claro, pero voy aprendiendo. Has logrado un reportaje fotográfico insuperable y puedo observar detalles que antes no veía.¡Es genial!
Gracias mil.
Un abrazo.
Mari Carmen.
¡Felices Vacaciones!

Sergio Harillo dijo...

Muchas gracias, Mari Carmen. La verdad es que me gustaría haber hecho mejores fotografías, pero entre la luz, la cámara que tampoco es muy buena y mi pulso no pude utilizar más zoom.

¡Un saludo y felices vacaciones para ti también!

Líbero en zona dijo...

Magnífico Susillo. Sus calidades siempre me dejan sorprendido, pues poseen esa fuerza inspiradora que emana de la pasión y el arrobo artísticos. Me alegro de que se haya producido esta intervención para mejorar el estado general de esta pieza, si bien para mi gusto la vegetación eliminada la dotaba de un cierto halo de decadencia romántica exquisito.