sábado, 25 de abril de 2015

Los Jardines de La Madrina renacen como zona verde


Las labores de recuperación de los Jardines de La Madrina, junto a la delegación municipal de Medio Ambiente, avanzan lentamente después de que el Ayuntamiento aprobara en noviembre de 2013 su adecentamiento. Los trabajos consisten en la creación de parterres y la habilitación de caminos peatonales que favorezcan el tránsito entre el Lope de Vega y la calle Palos de la Frontera así como la plantación de nuevos arbustos y plantas de temporada.





La actuación, muy simple y quizás por ello mucho más atractiva, se aleja del concepto de plaza dura utilizado en los alrededores del Lope de Vega donde los caminos se asfaltaron y las glorietas y parterres se diseñaron de cemento coloreado. A base de piedras de diferentes colores y distintas especies de plantas se ha conseguido un interesante contraste que recupera una zona verde muy degradada hasta hace unos meses cuando se utilizaba como aparcamiento.




Lamentablemente las obras se han ceñido al espacio que sirve de acceso a la Delegación de Medio Ambiente (edificio heredado de la Exposición Iberoamericana y que ha sido profundamente transformado por sus sucesivos inquilinos) sin alcanzar la zona que llega hasta la trasera del Pabellón de Chile, que también necesita una actuación urgente.




El Ayuntamiento da un pasito más en la puesta en valor de una zona con un gran potencial que no termina de aprovecharse. Los antiguos jardines de San Telmo han sufrido mucho con el paso del tiempo y el continuo uso al que se han visto sometidos, pero tanto por su ubicación como por las instituciones que albergan podrían convertirse en una zona de recreo para sevillanos y visitantes. El primer paso es adecentar la zona, pero realizar una planificación de las actuaciones que se lleven a cabo es fundamental para evitar que cada espacio se convierta en un oasis independiente de lo que tiene alrededor. Para su mejor conservación quizás sería adecuado incluir este espacio dentro de lo que denominamos Parque de María Luisa a pesar de la avenida que divide ambos sectores. De este modo se recuperaría una unión que viene del siglo XIX cuando ambas zonas verdes pertenecían al Palacio de San Telmo y formaban un solo espacio ajardinado al tiempo que se le daría una mayor relevancia como Jardín Histórico. Sumando ambos sectores, tendríamos un polo cultural al norte del Parque (Casa de la Ciencia, Teatro Lope de Vega, Fundación Madariaga, Biblioteca Provincial) y otro al sur (Museo Arqueológico, Museo de Artes y Costumbres Populares y Biblioteca Central de la Universidad) unidos por el propio Parque de María Luisa.