La ciudad de Sevilla siempre ha destacado por su patrimonio, pero rara vez ha formado parte del club de ciudades en las que la arquitectura contemporánea sea una seña de identidad. Es por ello que sorprende encontrar este tipo de proyectos experimentales que tienen a nuestra ciudad como objetivo. Los arquitectos Ayrat Khusnutdinov y Zhang Liheng han realizado un proyecto para revitalizar la fábrica de tabacos de Altadis en Los Remedios. El proyecto aprovecha la escusa de darle un uso a la antigua factoria para rediseñar esta zona de la ciudad, creando un puente peatonal que comunicaría ambas orillas del río.
Este puente contaría con una cubierta ajardinada que protegería del sol y las altas temperaturas a los peatones, que encontrarían en su parte inferior una variada oferta entre cafés, salas de exposiciones, tiendas además de un paseo junto a la lámina de agua para cruzar al otro lado del río. La antigua fábrica se reutilizaría como espacio cultural, con un auditorio con 450 localidades al que se accedería por una nueva plaza pública. En la orilla del paseo de las Delicias, un nuevo edificio en altura serviría como símbolo visible de la actuación.
Si bien no se trata más que de una propuesta que jamás se construirá, llama la atención que se hayan tenido en cuenta ciertas cosas, como que ya se ha planteado en alguna ocasión la construcción de una pasarela peatonal en esta zona del río o que sólo utilice uno de los edificios de la fábrica, precisamente el que pasaría a manos del Ayuntamiento en una hipotética reurbanización de los terrenos de Altadis. ¿Casualidad o buena información? Sea como sea, este tipo de proyectos son muy positivos para la ciudad puesto que aportan novedades y soluciones que podrán gustar más o menos pero que alimentan la propia evolución de la ciudad dándole nuevos horizontes, por no hablar de la publicidad que hacen de la propia ciudad en publicaciones especializadas.
Imágenes e información de archdaily.com
Fuente: Sevilla21
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