Al nuevo alcalde le llueven los problemas heredados de la nefasta gestión en determinados asuntos llevada a cabo por la anterior corporación. Todo eran prisas por hacerse las últimas fotos y ahora resulta que no hay dinero para comprar los muebles de la nueva sede de la Policía en La Ranilla o para poner semáforos en el paso subterráneo de Los Arcos, entre otros muchos problemas.
En el apartado turístico, el Consorcio de Turismo advierte de que se podría perder una inversión superior a los seis millones de euros si el Ayuntamiento no actualiza diversos pagos que ascienden a los 2'6 millones de euros. En el informe entregado a los nuevos ediles del Gobierno municipal se hace referencia a algo que hemos denunciado en varias ocasiones en este Blog, la precaria situación del Castillo de San Jorge, el Costurero de la Reina o el futuro Museo de Cerámica. En Sevilla se suelen hacer las cosas con el dinero que aparece debajo del sofá y luego nadie sabe quién debe hacerse cargo de lo que se ha hecho, o se abre de cualquier forma para vender todo lo vendible y luego la patata caliente que la agarre otro.
Vayamos por partes. En diciembre de 2009 se abrió el centro de interpretación del Castillo de San Jorge tras unas obras que se alargaron durante años. Una vez abierto al público, el Consorcio de Turismo se hizo cargo de un espacio que por lógica debería haber gestionado la Delegación de Cultura a través del ICAS. El dinero era el que había y pronto hubo que reducir a mitad el horario de apertura dejando el centro cerrado por las tardes, al igual que pasó con el Costurero de la Reina reconvertido en Oficina de Turismo tras el fracaso del Centro Temático de la Exposición Iberoamericana. Ahora el Consorcio se encuentra con dos espacios que no puede mantener y urge a que se busque una solución que pasaría por cobrar entrada en el Castillo.
¿Qué nos dice la lógica? No hay que viajar muy lejos para comprobar que en cualquier ciudad con este tipo de instalaciones, la entrada se paga. El Castillo de San Jorge, por su importancia y por los servicios que presta (audoguías) debería cobrar entrada. Es tan sencillo como sumar dos más dos. Debemos dejar de pensar en el todo gratis ya que no sólo no lleva a ninguna parte sino que termina volviéndose contra las administraciones, incapaces de destinar tanto dinero a equipamientos. Pero ésta no debe ser la única medida a tomar, hay que empezar a pensar con una mentalidad más actualizada, crear una figura dentro de la Delegación de Cultura que se encargue de la gestión de los espacios culturales del Ayuntamiento, que les dé vida, que los dinamice, que contribuya a su difusión. Volvemos al problema de siempre, se inaugura un espacio y se espera que la gente acuda por obra y gracia del Espíritu Santo; si no se sabe que existe, ¿cómo se va a visitar?
Habrá que esperar a ver cómo evoluciona este problema con el cambio de gobierno, esperemos que llegue algo de cordura a la gestión de los espacios culturales. Curiosamente en Antiquarium ya se cobra entrada a pesar de que no cuenta ni con la mitad de servicios que el Castillo de San Jorge, pero de esto, hablaremos otro día...
Fuente: Diario de Sevilla
2 comentarios:
Un tema que me interesa mucho y en el que coincido plenamente contigo. La gestión es un tema primordial y en la ciudad parece inexistente, esperemos que mejore, aunque me temo que nos vamos a encontrar constantemente con posturas enfrentadas entre Junta y Ayuntamiento.
Estoy muy de acuerdo con acabar con la mentalidad de que todo debe ser gratis, pues la verdad la gente no lo valora, y si deseo ofrecer un servicio o un producto de calidad, para lograrlo es necesario añadir un valor agregado.
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