martes, 29 de marzo de 2011

El PSOE presenta su programa cultural, más de lo mismo

Esta mañana se ha presentado el programa cultural del PSOE para las próximas elecciones. Mercedes de Pablos, número 2 en la lista de Juan Espadas, ha definido la Cultura no sólo como un conjunto de propuestas, sino como lo que nos ha definido como ciudad, tanto en el pasado como en el presente y en el futuro.

Lo más destacable del programa es la intención de mejorar la gestión de la Cultura en la ciudad para convertirla en un motor de desarrollo que genere riqueza. Para ello, el ICAS necesita una remodelación que lo haga más efectivo, eliminando gastos superfluos con el fin de redistribuir los recursos de forma más eficaz. Como hizo el otro día Mercedes de Pablos, Espadas ha vuelto a defender que Cultura alcance el 2% del presupuesto total del Ayuntamiento. ¿Cómo? Mejorando la gestión.

Además de la gestión, Espadas ha hecho especial hincapié en la colaboración público privada para conseguir un proyecto común que sirva de base para crear una estrategia global, ambiciosa y realista. Sólo si todos arrimamos el hombro, lograremos que Sevilla se convierta en un foco cultural de importancia con una agenda potente que genere un atractivo para el turismo.

Y poco más. Sin duda la Cultura de nuestra ciudad necesita una mejor gestión para ser más competitiva. Para ello, el impulso del Consejo municipal de la Cultura es primordial para lograr, entre todos, un proyecto sólido. Sin embargo, me esperaba algo más de ambición. La presentación del programa se ha limitado a citar uno por uno los proyectos que ya están en marcha, mostrando el apoyo que el Ayuntamiento debe mostrar hacia ellos. Se ha hablado de los festivales privados, de los públicos, de la importancia de la Bienal de Flamenco o de la necesidad de mejorar el presupuesto de la Orquesta Sinfónica y del Maestranza, pero se ha echado en falta la apuesta por otro tipo de proyectos fundamentales para la ciudad pero que ni han aparecido en el discurso. ¿No tiene nada que decir el Ayuntamiento sobre la ampliación del Bellas Artes? ¿O sobre el Museo Arqueológico? ¿Qué pasa con la Colección Bellver? ¿Seguirá funcionando y con qué medios el Centro de las Artes de Sevilla? ¿Se intervendrá, por fin, en la Sala San Hermenegildo? ¿Cómo se va a poner en valor el amplio patrimonio heredado? Era el momento perfecto para que el Ayuntamiento dejara bien claro que apuesta por la Cultura. Por toda la Cultura. Y eso incluye esos proyectos estancados que llevan años sobre la mesa y no terminan de arrancar.

Espadas ha hablado sobre la Fábrica de Artillería sin especificar qué uso tendrá o con qué dinero se restaurará. También ha alabado la importancia de los libros y la lectura, pero no ha tenido ninguna palabra hacia las bibliotecas y el Plan Municipal que recoge hasta treinta bibliotecas en la ciudad cuando sólo han sido inauguradas dos en los últimos años. Sí que ha tenido gran peso en el discurso la Bienal de Flamenco, un arte que para Espadas debe ser reconocido en la ciudad por su importancia internacional. Para ello la Bienal debe trabajar durante todo el año para difundir el Flamenco entre la ciudadanía. La música y sobre todo las bandas de cornetas y tambores también ocupan un lugar en el corazón de Espadas que no ha dudado en ceder parte del convento de Santa Clara para que lo utilicen como lugar de ensayo, escuela de música o taller para restaurar instrumentos. Pero sobre continuar con la rehabilitación del edificio nada de nada.

En definitiva, Espadas propone mejorar la gestión municipal de la Cultura, dándole mayor transparencia y abriendo la puerta a que la ciudadanía y los agentes culturales participen de la misma. Una magnífica noticia, sin duda, pero que no aporta nada nuevo a la ciudad, es algo que ya se debería estar aplicando desde hace años. Vender como algo novedoso que se va a mejorar la gestión de la Cultura no hace más que reconocer los fracasos del pasado. Es evidente que hay que mejorar muchas cosas, pero Sevilla necesita algo más. El cambio en la gestión se daba por descontado. Personalmente, no me esperaba un macroproyecto al estilo de un Museo Guggenheim, pero sí algo más de ambición, imaginación e ilusión. Si Juan Espadas gana las elecciones y cumple su programa cultural, tendremos una maquinaria bien engrasada que consolide lo que ya existe, pero que nadie espere novedades. Ha definido la Cultura como un motor de desarrollo generador de riquezas pero la impresión tras escucharle es que Sevilla debe conformarse con lo que tiene a día de hoy.

2 comentarios:

Pablo dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Pablo dijo...

Por lo que leo por aquí parece que la falta de ambición domina, la máxima ambición que hay, ¡Es poder cumplir con lo prometido!
Si no se ponen soluciones concluyentes vamos a seguir inmersos en esta deriva y proyectos que se cumplen por goteo eternamente. A Sevilla no le falta potencial, le falta quien lo sepa aprovechar, y me parece que la gestión que ofrecen desde el PSOE va a seguir iendo a medio gas, tirando para en punto muerto.

P.S: El anterior comentario era mio, lo borre porque aparecía un nombre incorrecto.