jueves, 9 de diciembre de 2010

Los nuevos barrios de Sevilla

Imagen de Google Maps


El actual Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) definió, hace ya algunos años, cómo sería la Sevilla del futuro. Uno de los capítulos más importantes e impactantes del Plan es el referido a los nuevos barrios que harán de Sevilla una ciudad mucho más grande y mucho más compleja de la que conocemos.

En la imagen que encabeza el post tenemos una imagen aérea de Sevilla en la que se han señalado los principales nuevos barrios que se construirán en la ciudad en las próximas décadas (algunos de ellos son tan grandes que necesitarán mucho tiempo hasta darse por concluidos). Recientemente el Ayuntamiento ha dado luz verde al inicio de las obras en dos de estos barrios inyectando 42 millones de euros para el desarrollo de los terrenos. Como podemos ver en la imagen superior, la mayoría de esos nuevos barrios se construirán en zonas del extrarradio de la ciudad aumentando en varios millones de metros cuadrados su extensión y, seguramente, complicando la vida a los ciudadanos. ¿Por qué complicando? Para empezar serán barrios bastante alejados de la ciudad consolidada y difícilmente comunicables con la misma. Veamos barrio a barrio cómo será la Sevilla del futuro.

Hacienda del Rosario (círculo verde en la imagen superior)

Será uno de los barrios que empiecen a construirse a partir del año que viene gracias al dinero aportado por el Ayuntamiento. El Grupo Gabriel Rojas será el encargado de levantar 2.000 viviendas tanto de renta libre como con algún grado de protección. Su ubicación supone el principal hándicap para el desarrollo de esta bolsa de terreno ya que se encuentra al este de la ciudad, junto a la A92 y rodeada por polígonos industriales y terrenos de cultivo. Su lejanía con respecto a la ciudad consolidada y la dificultad para comunicarlo por medio de transporte público podrían suponer un verdadero quebradero de cabeza para sus habitantes, que dependerán en exceso del vehículo privado. Este tipo de barrios corren el peligro de convertirse en zonas dormitorio donde la población no haga vida.




Palmas Altas Sur (destacado en lila en la imagen superior)

Mejor ubicado, pero con similares problemas de comunicación está el otro barrio que empezará a andar el año que viene. Se trata de una gran extensión de terreno al sur de la ciudad, entre los ríos Guadaíra y Guadalquivir (en su zona portuaria) que tendrá como vecino a la galardonada sede de Abengoa, justo al norte del nuevo barrio. La única forma de comunicación con la ciudad será por medio de la A4 que va hacia Cádiz y que separa este nuevo barrio de la zona consolidada más cercana, Bellavista. Al norte, los problemas de comunicación con Los Bermejales son similares. En total serán 2.800 viviendas entre las que destacan una serie de torres que alcanzan las 17 plantas y que servirán de fachada hacia el río Guadaíra. Metrovacesa es la encargada del desarrollo de estos terrenos.




Buen Aire (rojo)

El futuro barrio del Buen Aire podría ser el próximo en construirse ya que el Ayuntamiento está trabajando actualmente para desbloquear el proyecto. Su ubicación al noreste de la ciudad cuenta con ventajas e inconvenientes. Por un lado, al estar junto a las vías del tren está planeado construir un apeadero de Cercanías que se sumaría a los de Palmete-Padreo Pío o Palacio de Congresos correspondientes a la línea C4. Además, se ubica junto a la avenida Kansas City por lo que la comunicación con el resto de la ciudad debería ser más fluida. Sin embargo, su cercanía al aeropuerto impide la construcción de un gran número de viviendas, reservándose a esta tipología el extremo más cercano a Kansas City, el resto son edificios de uso terciario y empresarial. El estar completamente cercado por vías rápidas es otro impedimento para la habitabilidad de este barrio ya que queda muy incomunicado con lo que tiene alrededor. En cuanto al diseño del terreno, se plantean dos grandes avenidas, una norte-sur que acogería el boulevard que vertebra las diferentes manzanas y otra oeste-este que se soterraría junto a la estación de Cercanías para dar paso a una gran plaza pública que sería el epicentro del barrio.



Santa Bárbara (azul)


Sin duda éste es el barrio por excelencia de cuantos plantea el PGOU. De hecho, en el proyecto se habla de distrito más que de barrio. Los números hablan por sí solos: 4 millones de metros cuadrados de extensión, 17.000 viviendas, 700.000 metros cuadrados destinados a usos terciarios y empresariales, 1'5 millones de metros cuadrados de zonas verdes... Una ciudad dentro de la ciudad. Santa Bárbara será, por su extensión, la zona que más tarde en desarrollarse. Ubicado al este de la ciudad, servirá de ampliación al ya de por sí populoso barrio de Sevilla Este.


Las imágenes dan una idea de lo que será este nuevo centro urbano. Santa Bárbara puede convertirse, perfectamente, en un polo de atracción ciudadano por sus dimensiones y espectacularidad. Sus habitantes no dependerán tanto del resto de la ciudad ya que todo está planeado para que la vida en el barrio sea lo más cómoda posible. Por tener, tiene hasta un río cruzando por medio del barrio con su consiguiente paseo de ribera. Toda una opotunidad para hacer ciudad de una forma planificada y sensata.



Otro de los barrios que dió mucho que hablar hace algunos años fue el que está previsto en las antiguas instalaciones de Cruzcampo en la Avenida de Andalucía (naranja). Su situación inmejorable hizo que la empresa constructora tirara por todo lo alto en el diseño del nuevo barrio, ni más ni menos que se convocó a Norman Foster, Jean Nouvel y Arata Isozaki, arquitectos de gran prestigio internacional a los que se sumó el sevillano Vázquez Consuegra, para el diseño del nuevo barrio. La crisis paralizó el que iba a ser uno de los primeros nuevos barrios en construirse, la empresa entró en números rojos y poco más se ha vuelto a saber del proyecto. Una pena, porque prometía regenerar y dar un nuevo impulso a esta zona de Nervión.

Mientras que algunos barrios pasan por mejores o por peores momentos, otros directamente han sido desechados. Es el caso del que se iba a construir en Ciudad Jardín, donde estaba la antigua Facultad de Ciencias de la Educación. A una menor escala que los comentados, esta nueva zona hubiera dado respuesta a la falta de viviendas en el interior de la ciudad, en un barrio completamente asentado y con unas comunicaciones envidiables (la estación de Metro de Gran Plaza queda a pocos minutos). La crisis ha hecho que la Universidad se replantee el proyecto y finalmente no venderá el terreno, conservando el edificio para nuevos usos.

Tras conocer cómo serán los barrios donde vivirán los sevillanos dentro de unos años, deberíamos reflexionar sobre la idoneidad de la construcción de miles de viviendas en una ciudad completamente estancada en cuanto a población desde hace años. Sevilla supera a duras penas los 700.000 habitantes mientras su corona metropolitana no deja de crecer. Por todos es sabido que la gente huye de la capital al no poder pagar los precios de las viviendas, eligiendo los pueblos de los alrededores para fijar su residencia mientras sigue trabajando y gastando su tiempo de ocio en la capital. Esto supone un grave problema en los accesos y comunicaciones en una ciudad que no termina de ser lo suficientemente atractiva para atraer a nuevos habitantes. Ésta debería ser la principal misión de nuestro Ayuntamiento, hacer de la ciudad un lugar de inversión e inmigración. Por muchos nuevos barrios que se construyan, difícilmente podrán ser habitados si no hay personas que requieran de un hogar en la ciudad. 

Por otro lado, la construcción de estos inmensos barrios en el extrarradio de la ciudad supondrá todo un reto para un Ayuntamiento que en materia urbanística deja bastante que desear y que ha fracasado en zonas como Sevilla Este, sobre todo en materia de movilidad.

8 comentarios:

Sevalber dijo...

¿Más crecimiento? No gracias.

Hispalense dijo...

Me gustaría preguntaros si en el caso de Palmas Altas no afectará la reclamación (para mí delirante) de esa parte del término de Sevilla por parte del Ayuntamiento de Dos Hermanas. Me parece interesante todo lo que se expone en el artículo pero en lo de Palmas Altas no veo bien lo de las torres de 17 plantas máxime cuando el edificio de abengoa no es tan alto y les ha quedado francamente bien. Y contestando a Sevalber, yo sí estoy a favor de más crecimiento pero ordenado, por favor. Y que no se repitan barbaridades como las que han destrozado pueblos aljarafeños como Tomares o Bormujos. Por cierto, miedo me da lo del cercanías al norte del Aljarafe no vaya a ser que también se acaben de destrozar Salteras,Valencina, Olivares,etc.

Sergio Harillo dijo...

Pues la reclamación de Dos Hermanas afectaría y mucho ya que toda esta zona pasaría a depender del término municipal nazareno.

Independientemente de la legitimidad del Ayuntamiento de Dos Hermanas de reclamar esos terrenos, habría que preguntarse la finalidad con que lo está haciendo. ¿Realmente Dos Hermanas solucionaría algo añadiendo a su término municipal barrios como Bellavista o Los Bermejales? Seguramente no. Además, esos barrios no quieren depender de Dos Hermanas y creo que la opinión de los vecinos debería prevalecer por encima de los deseos de un alcalde.

Un saludo!

Sevalber dijo...

¿Seguir creciendo? ¿Para qué? La única respuesta que encuentro es para seguir manteniendo este modelo económico insostenible.

El Centro Histórico está repleto de viviendas vacías, de casas que no se venden, la vivienda nueva todavía se vende aún menos. Las promociones de vivienda pública se quedan sin cubrir. Me parece mucho más urgente reordenar y rehabilitar la ciudad ya existente. Como se apunta en la entrada la población sevillana está estancada, y no de ahora... ¿Más barrios? ¿Para qué?

Más consumo de suelo, más degradación del territorio, más empleo del vehículo privado, barrios que se comportan como ciudades dentro de la ciudad de lo que encima se enorgullecen sus promotores...

¿Principal misión del Ayuntamiento hacer de la ciudad un lugar de inversión e inmigración? Rotundamente NO, lo que necesitamos es calidad de vida, esa es la auténtica modernidad, no seguir creciendo, satisfacer nuestras necesidades en el entorno más cercano. ¿Pero es que el área metropolitana no se ha convertido ya en un monstruo como para pretender seguir creciendo? ¿Crecimiento ordenado? ¿Qué es crecimiento ordenado? ¿Algo diferente a satisfacer las expectativas de las constructoras?

Mucho carril bici, mucha pseudopeatonalización, mucha mentira sostenible, a la hora de la verdad el dinero es el que manda, y se traduce en más infraestructuras para las "áreas de oportunidad" de los "oportunistas"...

Sigamos por el mismo camino, los que se queden cuando nosotros no estemos nos lo "agradecerán"...

Sergio Harillo dijo...

Sevalber, estoy de acuerdo con gran parte de lo que dices (aunque con matices), sin embargo no termino de entender que rechaces que Sevilla sea un lugar de inversión, que genere empleo y riqueza y por tanto sea atractiva para que personas de otras partes del mundo elijan Sevilla como ciudad donde vivir. ¿A qué llamas calidad de vida? ¿A montar un bar? Porque parece que es lo único que casa con cierta idea de Sevilla que se defiende a ultranza. La calidad de vida para mí es tener oportunidades de encontrar empleo en la ciudad, es poder desplazarme en transporte público por la ciudad, es tener una variada oferta cultural donde invertir mi ocio, es poder pagar una vivienda digna, etc. Y para todo eso es necesario que Sevilla empiece a despuntar en algo que no sea... esto... pues... ¿en qué despuntamos?

Un saludo.

Sevalber dijo...

Hablo de más I + D + i y de menos "infraestructuralismo". Y esto también es inversión, menos cortoplacista claro...

Hablo de educación, de cultura, de civismo, de capacitación, de ciudadanos participativos. Hablo de lo que escasea vamos... ¿En la deriva que llevamos Sevilla es una ciudad atractiva para vivir?

Lo de montar un bar... ¿si en vez de bar ponemos restaurante y lo montamos en lo alto del metropol si vale? al menos es lo que casa con cierta idea de Sevilla que se defiende a ultranza... :-P

Estoy de acuerdo en lo que enumeras como elementos de calidad de vida, como es lógico vamos... Pero nada va a cambiar en todo lo que pides a base de un crecimiento insostenible, es más de lo mismo.

El concepto de progreso basado en el crecimiento continuo tiene los días contados, esa vereda tiene socavones inmensos, los que nos están avisando de los límites...

Sergio Harillo dijo...

Pero el I+D+i es inversión, ¿no? ¿En qué quedamos?

Evidentemente crear barrios por crear con el único fin de que determinados promotores se lucren, pues no aporta absolutamente nada a la ciudad. Sería mucho más útil arreglar los barrios que ya existen y dar salida a las viviendas que están sin vender. Pero para poder venderlas deberá haber gente con dinero para pagarlas, y para poder pagarlas deberán tener un trabajo. Volvemos a lo mismo, mientras Sevilla siga siendo una ciudad estancada no será un lugar atractivo en el que invertir y la gente se seguirá marchando de la ciudad.

Sevalber dijo...

Inversión sí, en un cambio de modelo de vida a lo que no contribuyen esas nuevas infraestructuras en forma de más barrios y más carreteras, sino que aumentan nuestra huella ecológica de forma innecesaria.

No sé si habrás leído algo sobre las "clases creativas"de Richard Florida, va en la línea de lo que comentas, dar facilidades a grupos de población para que se establezcan en las ciudades, ya que por sus características están capacitados para generar tejido productivo, esto a su vez provoca mayores desigualdades sociales y procesos de gentrificación (Casco Norte de Sevilla), con el incremento de las élites, de los precios inmobiliarios y la expulsión de aquellos con menor poder adquisitivo. A mí desde luego este modelo no me convence porque urbanística y socialmente no parece que sea sostenible.

La solución no es fácil, pero pienso que con el crecimiento urbanístico no caminamos hacia ella.