Fundación Valentín de Madariaga

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Tras el traslado del Consulado de Estados Unidos a un nuevo inmueble, el Ayuntamiento de Sevilla recuperó para su uso público el antiguo Pabellón que acogió a dicho país durante la Exposición Iberoamericana de 1929. En enero de 2006 saltaba la noticia a los medios de comunicación locales, el antiguo pabellón sería la sede de la Fundación Valentín de Madariaga que lo ocuparía por un período de 75 años a cambio de su restauración (valorada en aquella época en unos 4 millones de euros). De este modo, la Fundación podría abrir al público su colección de arte contemporáneo en la que se interpreta artísticamente la naturaleza bajo lenguajes y soportes tan diferentes como la escultura, fotografía, dibujo, pintura e imagen y sonido (unas 40 obras) y entre cuyos artistas destacan nombres como Andy Warhol o MP&MP Rosado.

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Las obras de acondicionamiento del edificio empezaron inmediatamente con la idea de abrir la sede a finales de 2006, coincidiendo con la II Bienal Internacional de Arte Contemporáneo de Sevilla. Y así fue, durante la muestra y hasta abril de 2007 se pudo visitar una parte del edificio en la que se exhibía la colección además de alguna exposición temporal. Después, el edificio fue cerrado para continuar con las obras de rehabilitación y dedicar todo el Pabellón a fines expositivos. La idea era crear un centro donde acercar las vanguardias artísticas a la población al mismo tiempo que se alentaba a los jóvenes creadores sevillanos a participar en proyectos impulsados por la propia Fundación.

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El hecho más característico de la rehabilitación fue la limpieza exterior del edificio, recuperando las tonalidades primitivas (puertas y ventanas habían sido pintadas en gris mientras que ahora lucen el color amarillento de la piedra) además de la limpieza y acondicionamiento de los jardines exteriores.

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Poco más se ha sabido sobre este proyecto. Han pasado dos años desde su cierre y no se tienen noticias sobre la reapertura de este espacio. El grupo empresarial al que pertenece la Fundación ha pasado recientemente por problemas económicos por lo que es de suponer que las prioridades para con la Fundación hayan pasado a un segundo plano mientras llega la recuperación económica. Mientras tanto las obras en el Pabellón han proseguido (ya está restaurada toda la fachada), los jardines están cuidados, goza de una iluminación nocturna y tan sólo queda esperar a que este nuevo espacio cultural reabra sus puertas para que sevillanos y visitantes podamos disfrutar de su programación cultural.

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