sábado, 28 de abril de 2018

¿Qué mejorarías en la cultura de la ciudad de Sevilla?




Después de diez años escribiendo en el Blog he adquirido una serie de "vicios" culturales y muchas veces me pregunto si determinadas situaciones las veo solo yo o son compartidas por más gente. Así que hace unos días lancé una pregunta a personas de mi entorno, todas ellas con formación cultural y que trabajan o están relacionadas con el ámbito cultural. Como historiador del arte es lógico que a mi alrededor esta profesión sea lo que más abunde, pero he intentado que cada una de las personas que han participado en la elaboración de este artículo tengan inquietudes distintas para radiografiar de una forma bastante amplia la realidad del sector cultural de la ciudad de Sevilla en la actualidad.

Ante la pregunta ¿qué mejorarías o qué echas en falta en la cultura en Sevilla? las respuestas han sido de lo más variadas. En total he reunido doce folios de información aportada por quince personas que, por motivos de espacio, tendré que resumir, pero aquí está el resultado de este pequeño experimento de investigación cultural.


Quizás uno de los temas que más ha surgido sea el de la gestión. Para muchos de los participantes es momento de pensar en lo que tenemos y, antes de embarcarnos en nuevos proyectos, mejorar lo existente. La primera que habla sobre este tema es Sonia Domínguez, periodista y lectora especializada en comunicación cultural. Desde su Blog Letras Anfibias lleva años analizando la realidad de las bibliotecas en la ciudad. Para Sonia, lejos de la espectacularidad de determinadas conmemoraciones efímeras que buscan atraer a aquellos que no suelen acercarse a la cultura, los equipamientos de base son fundamentales para mejorar el nivel cultural de la ciudad y en ese aspecto las bibliotecas ejercen un papel básico. Califica de "histórico" el retraso que vivimos en esta materia y se lamenta de que a nadie le importe. El funcionamiento de las bibliotecas sevillanas ha entrado, desde hace años, en esa constelación de problemas eternizados donde se podrían incluir los edificios sin uso, la ampliación del Bellas Artes, la reforma del Museo Arqueológico... Sonia culmina su aportación con una afirmación categórica "siete barrios de Sevilla están entre los diez más pobres de España y tengo una confianza ilimitada en la capacidad de las bibliotecas para influir más que positivamente en la vida de las personas".


Museo de Bellas Artes de Sevilla


La mejora en los espacios culturales de la ciudad es un tema recurrente en las valoraciones de los participantes. Ignacio Ruiz, estudiante de arquitectura y responsable del Blog Siglos de Sevilla pone el foco de atención en los museos de Bellas Artes y Arqueológico, "ambos con fondos de gran calidad pero deficientemente tratados por las administraciones". Ignacio insiste en que tenemos que ser más conscientes de lo que poseemos para valorarlo y tratarlo como realmente merece. Además da un toque de atención a la ciudadanía sevillana, que debería ser la principal interesada en reclamar que los museos estén en perfecto estado, y a los propios museos, que deberían buscar la fórmula de conectar mejor con el ciudadano de a pie.

En esta línea opina también Alberto Corts, historiador del arte muy activo en redes sociales. Corts centra su atención en el Museo de Bellas Artes, en el que echa en falta una programación de calidad y sobre todo una fuerte apuesta por las exposiciones temporales que tan buen resultado de visitantes dan al museo cuando las organiza. La exposición de los fondos del siglo XIX es otro frente abierto, así como una mayor colaboración con otras entidades. Corts cierra su intervención con una pregunta frecuente en el panorama cultural sevillano cuando se habla del Bellas Artes, "¿el problema es la falta de espacio, de financiación o de interés?".

Fran Domínguez, estudiante de fotografía, también se muestra preocupado por el estado de nuestros museos, que ante la falta de financiación presentan una imagen obsoleta. Al igual que Sonia, también ve en la cultura un elemento de base fundamental para el desarrollo social y, frente a una cultura que languidece, se reafirma en que la cultura se debe cultivar. Para ello insiste en la autocrítica, un aspecto que no suele estar muy presente en la sociedad actual. "Es sano y necesario ser críticos con nosotros mismos puesto que siempre hay aspectos que mejorar y retos que afrontar". Para Fran, la ciudad se encuentra estancada y solo con una profunda reflexión por parte de todos los implicados conseguirá ocupar el puesto que por historia debería tener.


Exposición de Ripollés en las calles de Sevilla (2009)


Además de la autocrítica la planificación a largo plazo es primordial para conseguir una agenda cultural atractiva. Javier Martínez, historiador del arte y responsable del Blog El Lápiz Colorao, especializado en arte contemporáneo, opina que mientras hay una parte de la programación que se tiene clara, como la Bienal de Flamenco o el Festival de Cine, el resto de actividades se van improvisando.

Sin duda para tener una oferta cultural planificada debemos volver a hablar de gestión. Para Sandra, aparejadora y responsable del Blog Expressan, "hablar de cultura es hacerlo también del modelo cultural de la ciudad y por definición, de políticas culturales". Sandra observa que en Sevilla existe un modelo establecido que gira en torno a los monumentos para atraer turistas, pero no hay un modelo de uso o de servicios de la cultura, "la ciudad está necesitada de un plan que lo englobe todo", incluyendo el turismo. Como solución propone un mayor diálogo entre todos los agentes implicados, tanto públicos como privados, para evitar que cada uno vaya por su lado, un camino "que no favorece a nadie".

Rafael Ruibérriz, flautista y gestor cultural, reflexiona en torno al papel que deben jugar cultura y turismo. "La indudable realidad de haber sido y seguir siendo una ciudad generadora de artistas y producciones de primera talla y el posicionamiento general de Sevilla como destino turístico son razones objetivas que refuerzan la necesidad de estrechar la relación entre ambos sectores". A su entender, una mejor conexión entre las dos disciplinas no sólo generaría un impacto económico, sino que crearía empleo de calidad y redundaría en políticas culturales de proximidad.


CaixaForum Sevilla, uno de los últimos grandes proyectos culturales de la ciudad


La colaboración entre instituciones, entidades privadas y agentes culturales es un punto muy a tener en cuenta para otros entrevistados como Guillermo Carrillo Ayala, arquitecto responsable del estudio Arquemí, que también actúa como espacio expositivo, o Irene Villén, historiadora del arte y gestora cultural. Guillermo aboga por una mayor transversalidad entre entes culturales de forma que un determinado producto cultural se difunda por sectores que, a priori, no lo consumen. Como ejemplo de colaboración establece varios planos, desde exposiciones organizadas de manera conjunta entre centros y equipamientos culturales locales hasta colaboraciones entre espacios públicos y privados o incluso abrir determinados espacios patrimoniales a eventos organizados por terceros para aumentar su oferta y, de paso, lograr ingresos extra. La apuesta por una programación metropolitana es otro punto a tener en cuenta en opinión de Guillermo, que no concibe la ciudad sin sus municipios limítrofes y viceversa, tanto en el plano cultural como en otros.

Irene Villén incide también en una mejora en la relación entre profesionales del sector para lograr un salto cualitativo en la oferta cultural de la ciudad. Para Villén, la colaboración entre el sector público y el privado puede y debe ser un punto muy beneficioso, no sólo para compartir ideas de gestión más novedosas sino para dotar de mayor uso a determinados espacios tanto en la capital como en la provincia. 

En esta línea indaga Carmen Ana Vicente, gestora cultural con amplia experiencia en proyectos culturales. A pesar de echar en falta determinados proyectos e iniciativas en nuestra ciudad, Carmen Ana establece una prioridad, "centrar el esfuerzo en mejorar lo que ya existe, sobre todo en torno a los bienes públicos". Solo cuando consigamos que lo que tenemos funcione de la mejor forma posible podremos plantearnos nuevos proyectos y objetivos. Para ello plantea un modelo de gestión mixta mucho más abierto que de pie a que el sector privado se encargue de la gestión de determinados espacios más allá del personal, ofreciendo la posibilidad de plantear nuevos proyectos culturales. De esta manera se daría voz a profesionales del sector que muchas veces no pueden desarrollar sus ideas por falta de un espacio adecuado.


Fábrica de Artillería


Reyes Abad, historiadora del arte con un postgrado en Gestión de Mecenazgo y Patrocinio Cultural resume muy bien varios de los puntos abordados. Plantea un mejor aprovechamiento de los recursos disponibles dinamizando y entrelazando las diferentes líneas patrimoniales con que cuenta la ciudad (arquitectura monumental, arte, diseño, botánica, restauración...), un mayor enfoque sobre los espacios existentes generando modelos de uso mixto que permitieran el uso de edificios históricos por parte de iniciativas privadas y una mayor coordinación entre organismos culturales y educativos con actividades de difusión y herramientas pedagógicas destinadas al ciudadano y, sobre todo, al público más joven, que suele ser el más reacio a consumir cultura.

Precisamente la comunicación y la difusión aparece en varias de las respuestas. Guillermo Carrillo echa en falta una plataforma donde consultar la programación cultural de la ciudad y su área metropolitana. Javier Martínez valora que la agenda del ICAS es incompleta y de difícil consulta, cuando no sería complicado recoger la oferta existente y clasificarla por zonas, áreas, precios... Ana Fernández, historiadora del arte y responsable del Blog La Paseante opina que la divulgación de las actividades culturales que se desarrollan en la ciudad debería ser más intensa y pone el acento en las artes escénicas, muy presentes durante la celebración de los distintos festivales pero que pasan más desapercibidas el resto del tiempo. También habla sobre la comunicación Santi Prado, historiador del arte y estudiante de Diseño Gráfico que valora especialmente el papel que podrían jugar las redes sociales en la divulgación de contenidos de los espacios culturales de la ciudad. De "asignatura pendiente" califica Reyes Abad la comunicación y publicidad de eventos culturales.

Por último, el Patrimonio, gran referente en este Blog, está muy presente en las respuestas de los entrevistados. Son varios los que se lamentan del estado del patrimonio en una ciudad que precisamente se vende como enclave patrimonial. Para Ignacio Granero, comunicador cultural en La Cultura Social, al igual que se está poniendo mucho énfasis en la Sevilla murillesca, hace falta una mayor atención hacia el patrimonio tanto histórico como contemporáneo, tan invisibilizado. Para Granero, el arte contemporáneo existe en la ciudad, pero está silenciado y no hay una verdadera apuesta por él. 

Irene Villén y Santi Prado también dan la voz de alarma sobre el patrimonio que, día a día, perdemos. La protección para evitar más daños al patrimonio es fundamental, pero también sacar adelante proyectos que llevan años pendientes. En este sentido Santi cita San Lázaro o Santa Clara como elementos que necesitan una intervención urgente y pone ejemplos de otras ciudades como La Térmica de Málaga, Matadero Madrid o Tabakalera en San Sebastián. Manuel Pablo Rodríguez, también historiador del arte y activo miembro de la Asociación Niculoso Pisano, pone el foco de atención sobre una necesaria actualización de la gestión de los espacios culturales de la ciudad y en especial pide una mayor protección del patrimonio regionalista, tan denostado durante años y que desaparece a pasos agigantados como ya lo han hecho elementos del caserío histórico de la ciudad. Es precisamente esta atención al patrimonio la que llevó a Ignacio Ruiz a estudiar arquitectura. "Poco a poco hemos ido perdiendo, y seguimos haciéndolo, parte de nuestro patrimonio y con él la propia esencia de Sevilla. Echo en falta una mayor preocupación por las pequeñas cosas que descuidamos y destruimos, que aunque para muchos no tengan valor por sí solas, granito a granito, van despojando a la ciudad de su historia". El cuidado del patrimonio es responsabilidad de todos, de los ciudadanos, de los políticos, de los promotores y de los arquitectos, las leyes patrimoniales están ahí, pero ojalá no hiciera falta recurrir a la amonestación para conservar lo que, en el fondo, es de todos.


Hospital de San Lázaro, pendiente de una restauración desde hace años


Resumir en un artículo la realidad cultural de una ciudad es sin duda una tarea titánica y sin duda habrá quién eche en falta muchos otros temas, pero creo que en estas quince acreditadas voces está la esencia de lo que es, y podría ser, la gestión cultural de nuestra ciudad. Con este post he querido dar la oportunidad a otras personas de expresarse en un espacio en el que soy el único que suele hacerlo. Todos ellos forman parte de mi día a día y, a casi todos ellos, los he conocido a través del Blog. Sus opiniones influyen mucho en mi apreciación de la cultura y espero que ahora, leyéndolos, tengáis una idea más amplia del microuniverso que forma la cultura en Sevilla. Gracias a todos por participar, ha sido un verdadero placer leer vuestras opiniones que comparto plenamente.

2 comentarios:

Gabriel M. dijo...

Muy interesante. Cómo ya sabes, mi postura tiene que ver con que está es una tierra con mucho patrimonio, poco dinero en general, y un interés por la cultura 'humanista' (artes y letras) repartido entre unos cuantos círculos más o menos pequeños de gente. Por eso digo creyendo que el dinero público solo debe ir a patrimonio y centros cívicos, y el resto hacerlo la iniciativa privada. Sí las actividades culturales son reducidas para el tamaño de la ciudad, es porque sociológicamente somos así. Por lo menos, que sean interesantes y de calidad.

Gabriel M. dijo...

Ah! Gracias de nuevo por este foro y saludos