Según informa Diario de Sevilla, la Junta de Andalucía habría planteado a los trabajadores de los museos y conjuntos arqueológicos gestionados por la Comunidad, modificar los horarios de apertura a partir del 1 de enero de 2013. Según la nueva propuesta, que ha sido rechazada por los sindicatos, los museos abrirían de 10'00 a 17'00, todos los días del año excepto los lunes.
La medida busca, según la Consejería de Cultura, ahorrar costes ya que con menos horas de apertura, el gasto energético sería menor. Los sindicatos se han negado a aceptarlo porque entienden que supondría la eliminación de puestos de trabajo.
Vayamos por partes. Cualquiera que haya viajado fuera de España habrá encontrado serias dificultades para visitar determinados museos europeos, que suelen cerrar a las 17 o las 18 de la tarde, lo que impide ver con tranquilidad sus colecciones. En España siempre hemos gozado de un horario mucho más amplio por motivos evidentes ya que el clima acompaña a estar en la calle hasta bien entrada la tarde. La reducción horario supondría, por lo tanto, un perjuicio para los propios museos porque se perderían visitantes. Está por ver si la Junta aplicaría esta medida a su joya de la Corona, el Picasso de Málaga, que abre hasta las 20'00 o las 21'00 dependiendo del día de la semana.
Por otro lado, la reducción horaria no tiene por qué implicar el despido de trabajadores sino que se podrían reorganizar los turnos para que todos trabajen las mismas horas y al mismo tiempo, se dotaría a los museos andaluces de algo que carecen actualmente, precisamente personal. Sólo hay que darse un paseo por los museos sevillanos para ver la ausencia de personal de sala, incluso se han dado casos como el Museo Arqueológico, que cierra parte de sus instalaciones sin previo aviso cuando falta personal.
Es evidente, y lo hemos denunciado muchas veces, que los museos andaluces (al menos los sevillanos) necesitan reorganizar su gestión íntegramente, desde arriba hasta abajo. El actual funcionamiento de los mismos deja mucho que desear y hay tantas cosas que cambiar que cuesta entender que lo primero en lo que se haya detenido la Consejería de Cultura sean los horarios, precisamente lo único positivo que tienen nuestros centros.
Fuente: Diario de Sevilla
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