Un año más, los 300 abonos para jóvenes que pone a la venta la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla se agotaron la semana pasada en apenas diez minutos.
A través de su página web, todo aquél que estuviera interesado en asistir por el módico precio de 40 euros a todos los conciertos que organiza la Sinfónica durante esta temporada, podía rellenar el formulario de petición. Eso sí, había que ser muy rápido, porque aquí el que no corre, vuela.
El que haya asistido a algún concierto de la Sinfónica habrá comprobado que, en general, el aforo no suele superar más allá del 75-80%. Visto el éxito del abono joven, ¿no sería interesante ampliar el número de abonos para facilitar el acceso al teatro de los más jóvenes al tiempo que se aumenta el aforo? Otra de las opciones para evitar las butacas vacías y aumentar los ingresos del teatro podría pasar por vender las últimas entradas, poco tiempo antes del concierto, a un precio atractivo para aquellos que estén interesados en asistir.
1 comentario:
Algún día algún periodista debería descubrir el engaño de las compras por internet de las entradas del Maestranza. Es algo vergonzoso, y muy falaz.
Publicar un comentario