La Universidad de Sevilla ha inaugurado este curso la nueva Facultad de Ciencias de la Educación en la zona de Viapol, justo detrás de Derecho y Ciencias del Trabajo, completando así un gran campus que se alarga por la avenida San Francisco Javier con varias facultades y centros universitarios.
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Los arquitectos sevillanos Antonio Cruz y Antonio Ortiz han sido los artífices del nuevo edificio que ha costado 31 millones de euros y que acoge a 5.000 alumnos. Las obras comenzaron en 2007 y han sido noticia en varias ocasiones por el desencuentro entre arquitectos y Universidad de Sevilla. Una vez empezadas las obras, la dirección de las mismas fue retirada a Cruz y Ortiz alegando que sus ideas eran demasiado caras. Se introdujeron algunos cambios en cuanto a materiales y acabados que contaron con el rechazo de los diseñadores que han declarado no hacerse responsables de los fallos que pudiera tener el edificio tras dichos cambios.
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Lo más interesante del edificio es el patio interior de acceso a los dos volúmenes que conforman la Facultad y que están conectados en un nivel superior por medio de pasarelas que le dan un interesante juego al edificio.
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El patio se convierte en una zona de descanso muy agradable que, sin embargo, no ha sido bien diseñada en cuanto a vegetación. Al margen del poco cuidado de los ejemplares (algunos árboles ya están secos), no se entiende que se hayan plantado tan cerca de las paredes o debajo de las pasarelas con el previsible choque de las ramas con el propio edificio en cuanto crezcan. En pocos años varios de los árboles plantados deberán ser mutilados o directamente talados precisamente por la poca previsión a la hora de plantarlos.
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En serio, ¿a quién se la ocurrido la idea? Si recién plantado el árbol ya está torcido por chocar con la pasarela, ¿qué pasará dentro de cinco años?
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Y a vosotros, ¿qué os parece la nueva Facultad?
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2 comentarios:
Aún no la conozco, y eso que soy egresado de esa facultad. La verdad que lo necesitaba, porque los diferentes estudios estaba repartidos.
No sabía que el edificio es de Cruz y Ortiz (para mí señal de buen hacer) aunque haya tenido problemas luego. Con respecto a lo que comentas de los árboles, va siendo una moda plantar para luego desmochar, sin prestar cuidado alguno.
El campus se ha reorganizado y bien podría haberse hecho algún edificio un poco más arriesgado, teniendo en cuenta que en esa zona se pueden hacer "experimentos" sin dañar el entorno. Ahora sólo queda esperar que se pueda llevar a cabo la Biblioteca del Prado (por cierto, ¿cómo va el asunto?)
Pues la biblioteca del Prado sigue igual que hasta ahora, parada y a la espera de que los Tribunales se pronuncien sobre el tema. Una verdadera lástima, pero bueno, esto pasa por empezar unas obras sin tener plenas garantías de que se puede hacer lo que estás haciendo.
Un saludo.
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