Detalles

Hablábamos el otro día de la falta de criterio estético de nuestro Ayuntamiento en determinados proyectos que no terminan de convencer precisamente por algunos detalles que chirrían.

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Estamos totalmente a favor de la política de peatonalización llevada a cabo por el Ayuntamiento, todos salimos ganando, los ciudadanos en calidad de vida y los monumentos porque se conservarán mejor. Las alternativas al transporte ya dejan bastante que desear y sería otro tema a desarrollar. Ahora queremos centrarnos precisamente en uno de esos "detalles" que no fueron tenidos en cuenta cuando se peatonalizó parte del centro: el mobiliario urbano. La elección del mismo ha sido desastrosa en todas y cada una de las actuaciones (tal vez sólo se salve y cogido con pinzas, la Alfalfa). El mobiliario de la Alameda de Hércules es totalmente desacertado e inapropiado; la Encarnación se ha sembrado de postes de farolas cuando antes había muchísimas menos, los parterres han sido vandalizados y las fuentes nunca funcionan; la Contratación se ha convertido en un gran vacío sin personalidad y por último, entre Plaza Nueva y el Prado encontramos tanta variedad de farolas como queramos, aquello parece un catálogo de venta más que un proyecto unitario. En la propia Puerta Jerez hay hasta tres tipos de farolas.

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Ahora el Ayuntamiento ha encargado un proyecto para unificar el mobiliario urbano entre Plaza Nueva y San Fernando. ¿Acaso no se dieron cuenta desde un principio de la variedad de farolas que había en tan poco espacio? ¿No se podría haber elegido un único mobiliario en aquel momento que seguramente habría salido mucho más barato? Pues nada, un par de años después de la gran obra, tendremos farolas y bancos nuevos, porque al parecer van a ser cambiados todos. ¿Pero qué pasa con las catenarias del tranvía? Recordemos que los cables están sujetos a farolas fernandinas, ¿se dejarán esas farolas en el recorrido del tranvía por Constitución y se pondrán nuevas farolas en el resto del espacio o acaso se va a desmontar todo el cableado eléctrico una vez más?

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Estos cambios de criterio, este actuar sin un rumbo fijo, no sólo es una gran pérdida de dinero en un momento muy delicado económicamente sino que dice mucho sobre la credibilidad del Ayuntamiento y su absoluta improvisación en estos y otros muchos temas.

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