El paso del tiempo, la suciedad y la altura a la que a veces se encuentran, hace que muchas esculturas de gran calidad pasen completamente desapercibidas alojadas en un retablo donde llevan siglos y en las que nadie ha reparado para otorgarles una autoría. Sin embargo, de vez en cuando algún historiador intrépido da con la tecla y hace un hallazgo sorprendente. Esto es lo que ha ocurrido en Carmona donde el historiador Fernando de la Villa Nogales ha atribuido una escultura de San Teodomiro, patrón de la localidad, ni más ni menos que a José de Arce con policromía de Juan Valdés Leal. La escultura remata uno de los retablos de la iglesia de Santa María y fue trasladada hasta las alturas en 1711, pese a haber sido concebida para recibir un culto más directo y cercano al fiel..
Los documentos aparecidos en el Archivo Histórico Provincial señalan que la obra fue encargada al escultor flamenco en 1655 por el alcalde mayor de Carmona. La importancia del descubrimiento radica en la escasa obra atribuida a este escultor, apenas una decena de obras entre las que se encuentran el Cristo de las Penas de la Hermandad de la Estrella y las figuras monumentales de piedra que decoran la tribuna alta de la iglesia del Sagrario. Con esta nueva atribución se da un paso más en el conocimiento de este artista que sirvió de puente entre el clasicismo de Montañés y el dramatismo de Ruiz Gijón o Pedro Roldán.
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Fuente: ABC
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1 comentario:
Estupendo que se descubran hallazgos así de importantes en un pueblo-ciudad preciosa como Carmona. Me agrada saber que se sigue trabajando en este tipo de cosas aunque sean por la curiosidad de uno o varios historiadores, siempre hay gente a la que agradecer el descubrimiento o resurgir de nuestro patrimonio.
Un abrazo
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