Sin duda una de las exposiciones más interesantes de las que se han celebrado en nuestra ciudad en los últimos meses. Una oportunidad única para conocer un poco más a este artista cubista que tan diferente es de la idea que tenemos del Cubismo (Picasso, Braque, Juan Gris). El título de la exposición "El cubista afable", hace hincapié en la amabilidad y dulzura de líneas y formas de este artista, sin embargo al estar delante de sus obras, llama poderosamente la atención que la mayoría no son figuras felices como podría suponerse por la amabilidad de las formas y los colores tan llamativos. Al contrario, son figuras introvertidas, encerradas en sí mismas y que muestran unos semblantes serios que invitan a la reflexión. La mayoría de las obras son de los primeros años de los años 50 del siglo XX, todavía queda muy reciente la Segunda Guerra Mundial, y quizás por eso las figuras, a pesar de estar en actitudes cotidianas, tienen la sombra de lo que pocos años antes había ocurrido en Europa y que tanto afectó a los artistas de las Vanguardias. Quizás lo más sorprendente de la exposición sean los tapices, en los que te sientes atrapado por su belleza de colores y formas.
Una exposición con pocas piezas, muy sencilla, pero con gran efecto. Estará durante todo el mes de agosto en la Casa de la Provincia. Y de paso, podeis visitar una selección de dibujos de Antonio Agudo, en la planta baja. Otra exposición bastante interesante, sobre todo los desnudos que hay en la segunda sala en los que el artista ha sabido captar a la perfección no sólo las líneas del cuerpo humano, sino la expresión de los rostros de los modelos.
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